miércoles, 29 de julio de 2009

El Quijote, revisado por Berto

En el cuarto centenario de la publicación del libro más laureado de las letras españolas, D. Quijote de la Mancha, surgió la iniciativa de "adaptar" a hip-hop algunos de los pasajes más famosos de la obra. Un gran concierto a las puertas de la Biblioteca Nacional de Madrid supuso el colofón a los actos de conmemoración de esta efeméride.

Parecía que en mayo de 2005 ya estaba todo dicho en cuanto a las versiones rapeadas de El Quijote. Sin embargo, hubo que esperar a noviembre de 2008 para que realmente surgiera alguien que les plantase cara a los mejores grupos del panorama hiphopero nacional: Berto Romero. El humorista catalán, y con motivo de la visita de Juan Diego Botto al plató de Buenafuente (el cual interpretó en versión hip-hop el monólogo de Hamlet, el conocido "Ser o no ser, esa es la cuestión") se atreve con una versión muy "sui generis" del clásico de Cervantes, que cuenta con un gran final.

jueves, 9 de julio de 2009

Filósofos alemanes, lagartos, ángeles y demonios


Cuando Eduardo Madina, en el marco de un curso sobre la violencia y el terrorismo de ETA en el País Vasco impartido en la Universidad Carlos III de Madrid, recomendó la lectura de este libro nos sorprendió y nos animó a partes iguales. Se trataba de una lectura voluntaria, pero venía con la premisa de que leyéndolo se podrían comprender algunos de los problemas de base del Euskadi actual. Y, efectivamente, el último capítulo dedicado a la identidad nacional y postnacional del pueblo alemán en particular, y de todos los pueblos en general, así como la entrevista concedida por J. Habermas a J.M. Ferry, a parte de constituir la columna vertebral de "Identidades nacionales y postnacionales", ayudan a entender un poco mejor lo que se esconde en la Euskadi actual y como la no aplicación del concepto de "universalismo" ofrecido por Habermas ha propiciado la actual situación de ruptura social y desconfianza. Según éste, universalismo es "relativizar la propia forma de existencia atendiendo a las pretensiones legítimas de las demás formas de vida, que se reconocen iguales derechos a los otros, a los extraños [...], que uno no se empecine en la universalización de la propia identidad, que uno no excluye y condena todo cuanto se desvíe de ella". Para una parte de la sociedad vasca (la izquierda abertzale) el principio de universalidad moral acuñado por Habermas carecía de sentido y significado, por lo que no ha sido respetado en absoluto, con las consecuencias que todos ya conocemos: terrorismo, extorsión, chantajes, violencia, etc. Es decir, no están dispuestos a conceder al extraño, al que no piensa como ellos, los mismos derechos de los que ellos disfrutan.

El libro se completa con otros dos excelentes ensayos sobre la trayectoria política y académica de M. Heidegger durante el nazismo y los años posteriores a la finalización de la Segunda Guerra Mundial, descubriendo así que la figura de este filósofo alemán, venerada por unos y criticada por otros, no sale muy bien parada debido a las investigaciones de Habermas. La segunda de las lecturas es un ensayo sobre Carl Schmitt en el que se trata de poner de relieve la vigencia del pensamiento de este firme detractor de la República de Weimar en nuestros días, ofreciendo el ejemplo de diversas corrientes que han proliferado en varios países a raíz del pensamiento de aquél.

Sin alejarnos del País Vasco completamente, "Obabakoak" nos ofrece un mundo de fantasía inspirado en el mundo rural vasco a lo largo de más de veinte relatos, creados por Bernardo Atxaga, articulados en tres bloques: las memorias de infancia del ingeniero Werfell y la publicación de la carta del canónigo Lizardi, en la que aparece un misterioso jabalí blanco; las nueve palabras a Villamediana, relato que, aunque inspirado en un pueblo de Castilla, nos acerca a las gentes que habitan en Obaba y a sus costumbres, consiguiendo que al terminar el capítulo sintamos el mismo deseo de viajar hasta allí, pasar una estancia de varios meses como el protagonista, y volvernos con la misma desazón con la que llegamos; y el tercero gira en torno a la historia de Ismael, Albino María y el lagarto. A estos últimos se les presupone la capacidad de "volver loca" a la gente si entran en las cabezas a través del oído. La historia, llevada al cine por Montxo Armendáriz con el nombre de "Obaba", deja el regusto amargo de las novelas antiguas sin final feliz a que tan poco nos tienen acostumbrados últimamente los escritores.


El último libro recomendado (por hoy) es "Ángeles y demonios", también llevado al cine este año y con bastantes buenos resultados en taquilla. En él, Robert Langdon, especialista en simbología de la Universidad de Oxford tiene que encontrar todas las pistas necesarias para evitar que la secta de los Illuminati acabe con la vida de los cuatro preferiti llamados a ocupar el sillón de San Pedro. Cabe destacar que la película y el libro, si bien guardan el mismo argumento central contienen variaciones en el guión que hacen que el resultado varíe tanto en uno como en otro. Como siempre ocurre en estos casos, es mucho más recomendable el libro, pues es más detallado que el film.

viernes, 3 de julio de 2009

El cocinero y las aves

Me encanta la metáfora que utiliza Eduardo Galeano en el vídeo que acompaña a esta entrada. Es bastante clara e ilustrativa, además de irónica (rasgo éste que ha acompañado a este escritor uruguayo a lo largo de su carrera). Cuenta que unos días antes de la charla, escuchó como un cocinero preguntaba a las distintas aves que tenía en su despensa, dispuestas para ser cocinadas, con qué salsa les gustaría ser cocinadas. Una humilde gallina, levantando su voz sobre el resto, dijo que ellas no querían ser cocinadas, directamente. A ello responde el cocinero diciendo que eso no entra dentro de la cuestión y que se centren en elegir la mencionada salsa.

Es una figuración en tono sarcástico, pero tristemente lo que cuenta Eduardo Galeano es verdad: los poderes fácticos del mundo son nuestros cocineros, y todos nosotros, el resto de ciudadanos sin poder (aparentemente), las aves que están esperando a ser pasadas por el matarife. Pero la pregunta que surge tras escuchar a Galeano es la siguiente: ¿cuántos gallinas (paradójicamente) están dispuestos a perder el miedo y plantar cara a sus verdugos, a los patronos que los axfisian, a los bancos que los presionan para que no se demoren en el pago, etc., recordándoles que lo que no quieren es rendirse al yugo que ellos representan bajo ningún acompañamiento?

Un buen manual de cómo levantarse contra el poder establecido lo podemos encontrar en el primer capítulo de "Rebelión en la granja" de George Orwell, en el que los animales que habitan en ella, hartos del trato que les dispensa su dueño y la vida, deciden rebelarse contra lo establecido y contra la suerte que les ha tocado. En este capítulo, no son sólo las gallinas las que se rebelan, sino que le acompañan el resto de animales: perros, caballos, cerdos, palomas, etc. Y así debería ser en realidad, porque aunque el cocinero acabe con las aves, siempre tendrá la despensa llena para hacer que sus salsas no se sientan solas.