viernes, 11 de diciembre de 2020

El filósofo frente a su obra

“En vez de la temida invasión de tanques soviéticos, Europa acogía con desconcierto a los siniestrados por su error doctrinal!”

“Si su anfitrión (Marx) había analizado magistralmente en sus obras la apropiación de la plusvalía económica por parte de la burguesía, no previó en cambio la posible incautación de la plusvalía política de los trabajadores en provecho de la elite comunista”.

 

Imaginemos por un momento que dentro de un siglo se concediera la posibilidad de resucitar a Donald Trump (sospechamos que no va a durar tanto, aunque se empeñe) y se le pusiera frente a un televisor o cualquier otro moderno aparato tecnológico de esa época a contemplar las consecuencias de estos cuatro años de división, racismo, antiecologismo y, en definitiva, de todas aquellas decisiones que han convertido al mundo en un lugar mucho más inestable que al inicio de su presidencia. Y no solo eso, sino que una vez finalizado este visionado se le interpelara en un talk show por aquellos sujetos que coincidieron con él en el tiempo, y utilizaran este espacio concedido en pleno prime time para cruzar con el personaje todo tipo de reproches.

Pues este ejercicio es el que nos propone Juan Goytisolo en el libro que hoy reseñamos, pero centrado en la vida y obra de los padres de la doctrina comunista: Karl Marx. Y no sólo de él, sino también de su familia (mujer, hijos, yernos, sirvienta).

En un mundo actual dominado por las marcas, el consumismo y el capitalismo, se enfrenta a Karl Marx a las carencias de su propia doctrina a través de varias situaciones que van desde una encerrona en un talk show en el que el entrevistado es hostigado por rivales políticos coetáneos que confrontan su doctrina con su aplicación a hechos contemporáneos, pasando por la visita al Club de Millonarios de Moscú, que se encuentra presidido por una cita del propio Marx, pero pronunciada cuando todavía abrazaba la doctrina capitalista, y finalizando por la visita a una exposición de cuadros con héroes del trabajo soviéticos en la que los personajes retratados cobran vida para reprocharle que las idílicas escenas que representan los cuadros no se parecen en nada a la realidad de las fábricas y de los campos de trabajo.

Para acceder a Marx y a su familia, el autor se vale de sí mismo, creando un personaje que entra y sale de escena interactuando con los protagonistas y luchando contra su editor, el cual se queja (a través del autor, en un claro ejemplo de aquello que llaman "ponerse la venda antes de la herida") de que el libro no tiene ritmo y que el mismo no ocurren cosas. Si el propio autor, a través de una persona interpuesta, ha llegado a esta conclusión, es fácil imaginar a la que hemos llegado los que nos hemos enfrentado al libro por primera vez.

La última parte del libro da cuenta del cambio de suerte de la familia Marx, representado por el cambio de domicilio desde el humilde habitáculo de Dean Street a la señorial villa de Maitland Park, llamada 'Villa Modenas'. Precisamente, este cambio de casa sirve de excusa para la grabación de un reality show ("Le baroume rouge") al que el autor resulta invitado, y el cual, entre pausa y pausa del rodaje, se va colando por las distintas estancias de la casa y contándonos la suerte que corrió cada uno de los miembros de la saga de los Marx, incluida la sirvienta Lenchen, cuyo papel para la sostenibilidad de la familia y para preservar los equilibrios dentro de la misma son más importantes de lo que aparentaba en un inicio.

La saga de los Marx es un libro bien documentado, que nos acerca a la figura y obra de Karl Marx a través de un formato poco habitual que, desde luego, no esperábamos en una aproximación historiográfica al ciudadano más célebre que vio nacer la ciudad alemana de Tréveris. Se trata, en definitiva, de un libro no demasiado accesible, que no es manejable para un primer acercamiento a la obra de Juan Goytisolo. 

No podemos decir que no nos ha gustado, pues es un libro original en su planteamiento y, como decimos, bien documentado, que trata temas (como el feminismo o la inmigración) con una soltura que puede resultar evidente hoy día, pero no hace treinta años. Sin embargo, esperábamos algo más, si se quiere ortodoxo, que prescindiera de ardides metaliterarios para acercarnos a la vida y obra de Marx. En esto último, sin duda, la responsabilidad recae en el que lee, y no en el que pretende experimentar con algo nuevo y diferente. Por eso, habrá a mucha gente que le convencerá el planteamiento, y otros a los que convencerá menos. En esta ocasión nos quedamos en el segundo grupo. 

jueves, 5 de marzo de 2020

En busca del árbol milenario


Siempre recordaré que el mismo día en que nos dispusimos a realizar esta ruta mis hermanos y yo, se produjo la misteriosa desaparición del vuelo 370 de Malaysia Airlines. Aún hoy, seis años después del suceso, sólo han podido recuperarse pequeñas piezas del fuselaje del avión, y ningún cuerpo de los pasajeros desaparecidos. Es la historia de una derrota infligida por los elementos de la naturaleza al ser humano, que ha impedido que, aun habiendo transcurrido tanto tiempo, se pueda dar digna sepultura a los pasajeros que aquel fatídico día llenaban el avión. Una derrota como la que, salvando las distancias, nos iban a asestar otros elementos de la naturaleza al final de la mañana.

Antes de saberlo, dejamos aparcado el vehículo junto al restaurante 'La Isla', al pie izquierdo, según se viene de Rascafría, de la carretera que conduce al Puerto de Cotos. Superado el restaurante, cruzaremos un puente de madera que nos dejará en una pista que discurre paralela al río.