martes, 9 de julio de 2013

Hasta los malos llevan bozal


La primera vez que fui al cine tendría unos 5 ó 6 años. Hace, por tanto, la friolera de veinte años que me adentré en la oscuridad de una sala con un objetivo, por aquel entonces, no muy bien definido. Pero recuerdo como si fuera hoy mismo el terror que sentí cuando un Danny de Vito caracterizado como 'El Pingüino' devoraba la nariz de un mordisco a uno de los miembros de la alta sociedad de Gotham City. Hoy ni siquiera eso sería posible, pues el malo de 'El Caballero Oscuro: La leyenda renace' lleva bozal, y tiene una voz que a veces impone, y otras sólo da risa.

Y es que uno de los puntos fuertes de las películas de Batman siempre han sido los malvados personajes que campan a sus anchas por Gotham City. Cómo olvidar al ya mencionado Pingüino, o al 'Dos Caras' interpretado por Tommy Lee Jones, o al 'Enigma' del zumbado Jim Carrey, y cómo no al 'Joker' del malogrado Heath Ledger (y sin dejar de lado la adaptación que en su día clavó Jack Nicholson). En la última secuela de la saga la maldad del encargado de sembrar el pánico en Gotham, Bane, no les va a la zaga a los anteriores, pero con la novedad de que para sus fechorías aprovecha la desesperación y el desencanto de los habitantes de la ciudad (algo muy común en estos tiempos, y estoy pensando en el caso de Grecia y su 'Amanecer Dorado'), que se unen a él en contra de los abusos de la clase dirigente de Gotham.

De Batman se puede esperar lo de siempre: aparatitos molones de última generación, con una capacidad mortífera sobrehumana y un ingenio fuera de lo normal. Interpretado en esta ocasión por Christian Bale (en esta ocasión más equilibrado que en 'American Pshyco'), y acompañado por su fiel mayordomo, encarnado por un dignísimo Michael Caine.

La trama es la de siempre: malo o grupo de malos quieren acabar con el mundo (sin pensar, al parecer, dónde podrán su tienda ellos después del Apocalipsis) y Batman y sus gadgets lo impiden, pero acompañados en esta ocasión por Anne Hathaway o 'Cat Woman' (bastante más guapa y llamativa que en 'Alicia en el País de las Maravillas' de Tim Burton). Obviamente en el trasfondo hay algo más, pero dejo que lo descubra a quíen todavía le pueda apetecer. Lo mejor de la película se encuentra en una de estas tramas secundarias, y muestra de ello son los escalofriantes gritos al unísono que aparecen en el trailer (y que no aparecen en la escena a la que pertenecen dentro del filme): cómo salían del pozo al que eran desterrados los condenados...y Batman.

En fin, un film muy efectista, con mucha acción, y que cumplirá las expectativas del espectador no muy exigente. Pero una cosa está clara, los niños que la vean no pasarán aterrados toda la noche ni mancharán de pipí los pantalones, porque en esta ocasión, aunque el malo quisiera darse un festín de cartílagos nasales no podría, porque hasta los malos llevan bozal.