sábado, 2 de enero de 2010

Propósito de enmienda

Como cada año que empieza, todos nos fijamos unos objetivos que rara vez hemos cumplido cuando llega el 31 de diciembre siguiente. Aún así, y para no perder lo que es una de las tradiciones navideñas por antonomasia (por delante incluso de llevar una prenda interior roja o beber champán o cava para brindar) hoy a día 1 de enero pretendo fijar los que para mí van a ser los objetivos del año 2010. Y con eso de que al dejarlos escritos ganan consistencia, si se me olvidan o no me apetece cumplirlos, sólo tendré que recordar esta entrada o borrarla, respectivamente.

Básicamente, los propósitos principales para el año 2010 dos: en primer lugar, conseguir que me despidan de una vez por todas de la empresa con más empleados de España. Y, en segundo lugar, seguir ejerciendo desde todos los sitios posibles y en las pocas oportunidades que se nos presentan a los ciudadanos de a pie lo que José Vidal-Beneyto califica como "resistencia crítica", y que el mismo autor explica en un artículo de 2008 en "El País":

"Hay que comenzar por ahí, por el análisis, la reflexión. Lo que no es fácil con la inesquivable tecnificación actual del pensar y el decir que con la storytelling y otros dispositivos orwellianos y con los juegos de vídeo nos condenan a la historieta y a la estampita.

Pero queda la resistencia crítica y en ella hay que situarse".

Otro de los propósitos para este nuevo año, si bien este tiene carácter secundario, es actualizar más asiduamente este blog. Como seguramente este sea uno de los que se quede en el tintero, es posible que el día 31 de diciembre de este año, si alguno se pasa por aquí esta frase ya no la vea.

En fin, que muchos éxitos profesionales, personales, económicos y espirituales y un próspero año 2010 a los que de vez en cuando os pasais por aquí, que no sois muchos pero sí los suficientes.

1 comentario: